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Somos música.

 

Hace años se me ocurrió que a la gente no le gustaba la música. La ciudad y su música han cambiado y ahora en el contexto web sigue llegando más lejos.  Aún así pensaba que  escuchaban u oían, mejor aún, la música porque está en todas partes pero no porque la escogen y se dedican a buscar información sobre los cantantes, los escritores y, encima, se ponen a escribir las letras en un cuadernito para memorizarlas y cantarlas, así sea mal.

Cantar mal no importa, es lo otro lo que importa. Lo otro es que esa música sea parte de nuestra vida, de nuestros recuerdos más íntimos que a través de esa música uno llegue rapidito al cuarto en el que estaba, al libro que estaba leyendo, a la boca, los ojos, las manos, el aroma que veía mientras sonaba y suena una pieza musical. Al momento en el que amábamos mientras sonaba.

Pero todo esto es subjetivo, yo pensaba que a la gente no le gustaba la música y debía convencerme de que quizá yo estaba en lo cierto, así que decidí comenzar a hacerle 2 preguntas a la gente que estudiaba francés, en ese entonces, conmigo.

 

-¿Le gusta la música?

-Síííí.

 -¿Qué música le gusta?

-Toda, toda. La música que suena en las busetas y en todas partes.

-Aaahhh. ¿Usted compra discos y se pone a escuchar esa música?

-No. La oigo por ahí.

-¿Usted sabe los nombres de la gente que canta y escribe la letra para aprendérsela?

-No, no hago eso.

¿Usted cree que le gusta la música o la escucha porque está?

-Mmm, creo que la escucho porque está en todas partes. Pero, no, no me apasiona. Me gusta, más nada.

 

Este es un resumen, muy resumido sobre todo lo que escuche. Había variantes que variaban (jajaajajaj, valga la redundancia) un poquito.

Alguna gente joven 23-35 años dijo que no le gustaba la música clásica, otros que no les gustaba el perreo, otros detestaban la música urbana, pero insistían, igual, que les gustaba la música que escuchaban por ahí, en la calle, en cualquier parte.

 

Muy bien. Yo sigo pensando que a uno algo que le guste así, así con tanta inconsciencia es como comer fast food, rapidito y con mucha Ketchup para que sólo sepa a eso.

 

Los invito a descubrir música de Iberoamérica y del mundo en NOTA.  

De vez en cuando habrá algún desliz porque es bueno, también para la salud del oído, dedicarse a vagabundeces. 

Los invito a enamorarse de los músicos y escritores, a degustar delicias y matices a través de su oído porque el oído en relación a los sonidos debería ser Rey y tratado así. 

Claro está, respire, respire y disfrute porque esto pasa rápido.

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